deseos + ilusiones + sueños = 2009

Estamos en el nuevo año y hoy ya se sabe, buenos deseos, buenas intenciones... pero el año tiene 365 días, y solo hace falta una milésima de segundo para que todo se vaya al traste. Se dice que tal como empiezas el año lo terminas. Vale. Pero... ¿quién sabe lo que va a pasar el 31 de diciembre del 2009? Yo, con vuestro permiso, voy a responder: nadie.

Nadie sabe lo que va a pasar durante este año, y mi consejo, es que no penséis en ello. Se pierde tiempo y se gastan energías. Lo importante aquí, es que en nuestro interior, sigamos el camino que hemos trazado. Cada un@ tenemos un camino elegido para nuestra vida. Lo mejor es seguirlo y no desviarnos nunca de esa senda. Si algo nos preocupa, nos da miedo, o nos provoca salirnos, no debemos echarle cuenta.

La roca se puede saltar, o incluso escalarla, y el tronco de árbol, si no podemos retirarlo, ni pasarle por encima, lo mismo.

Que nuestros deseos, ilusiones y sueños se cumplan, depende de nosotros no de los demás. Los demás nos pueden dar una alegría, una pena... pero nunca caminar por nosotros. Si encontramos a personas en nuestro camino que nos ayudan, que nos hacen sentir bien y que nos demuestran que no estamos sol@s, entonces no tenemos nada más que hacer que cogerles de la mano y seguir caminando. Pero nunca detenernos, nunca.

Mi primer deseo para este año fue personal, pero el segundo, fue para todo el mundo: que no se desvíen de la senda que se trazen, porque si se hace, entonces, no somos nadie, solo una marioneta de personas que solo son un bulto en el mundo.

FELIZ AÑO 2009