lunes, 20 de octubre de 2008

nosotros y nuestras historias

Este trabajo de escribir, a mi me parece el trabajo mas gratificante, inseguro y extraño del mundo.

Gratificante porque no hay palabras para describir lo que se siente cuando estás leyendo tu propia obra y preguntandote, al mismo tiempo, de donde carajos salió aquello, no hay palabras para describir que se siente cuando terminas algo bien sea una novela, un relato, un poema... no hay palabras para decir la mundo lo que sientes por ese manuscrito que tienes en la mesa, no hay palabras para decir que se te pasa por la cabeza cuando tienes tantas ideas y no sabes de donde salen porque es imposible que lo sepas.

Inseguro porque nunca están conforme con lo que has escrito, en un principio si, pero siempre se te mete en la cabeza que podrías haberlo plasmado mejor, que algo debería de estar ahí y no allí, pero nunca lo mueves porque luego dudas de que hayas hecho lo correcto. A veces lo cambias, pero nunca están conforme. Quieres la mejor manera de plasmar esa historia que en tu cabeza estás viendo, pero no hayas mas palabras que las que tienes ya escritas, no las encuentras, y nunca te aclaras si es que es porque no las hay mejor, o es porque no eres capaz de hacerlo mejor.

Extraño, porque quieres escribir una historia, pero nunca va por donde tu quieres, puedes querer escribir algo de humor y te sale drama, y no es porque no sepas, es que el personaje ha tomado su vida y tu solo eres un instrumento que la da a conocer. Extraño porque tal vez te ves en una encrucijada mientras cuentas la historia, no sabes como seguir, que hacer, que camino tomar, pero dejas al personaje, y el mismo, como si fuera real, toma el camino correcto. Es como si realmente, tuvieran vida propia, y quien escribe, sabe bien de lo que hablo.

2 comentarios:

Rafa dijo...

Gracias por la recomendación,
y es cierto que cuando acabas de escribir algo, es satisfactorio, incluso piensas que podrías haberlo hecho mejor.

Un abrazo

Arwen Anne dijo...

me alegro haberte servido de ayuda, si necesitas algo, no dudes en pedírmelo